Sábado 18 de junio del 2011 Seguridad
Gobierno exige se investigue crimen de hincha de Barcelona
Marcos Geovanny Rodríguez Delgado, hincha asesinado.
Esa agresión habría sido protagonizada por seguidores de Emelec, así lo reconocen algunos hinchas del equipo azul, quienes sostienen que el origen de la pelea “es una venganza: el robo de la camiseta gigante que la Boca del Pozo tenía (en la general de la avenida Quito)”.
Rodríguez, de 28 años, fue agredido el pasado domingo después del juego que los amarillos sostuvieron en el estadio Monumental ante Liga de Quito. La víctima se trasladó con amigos de la Sur Oscura (grupo que apoya a los toreros) a un bar frente al Malecón del Salado, donde suelen concentrarse antes y después de actuar.
Al poco rato, según testimonios de hinchas amarillos que prefieren la reserva de su identidad, llegaron al sitio varios carros (supuestamente dos eran Tucson y una Blazer) con seguidores plenamente identificados con el equipo millonario.
“Creo que la intención no era matarlo, sino que se les pasó la mano”, comenta otro aficionado eléctrico, quien además reconoce que al interior de la Boca del Pozo existe indignación desde el 2010 cuando se les llevaron “ese trapo” (así llaman a banderas o telas que usan para apoyar al equipo), que la Sur Oscura tiene “como trofeo”. Incluso han subido videos a YouTube mostrándola en la general sur del Monumental y cantando: “Te robamos la bandera/ que tu madre la venga a ver”.
“Ese robo solo generó sed de venganza entre los azules, peor que andan por ahí burlándose de la barra”, sostiene otro de los cercanos a la Boca del Pozo; incluso en páginas en las que siempre comentan seguidores eléctricos hay frases como: “Si nos buscas... nos encuentras..., pues nos encontraste...; ahora vas a saber quién es quién, qué pensaste que no descubriríamos dónde está la bandera...”.
Mediante un escrito, el ministro del Deporte, José Francisco Cevallos, hizo un llamado a desterrar la violencia en los estadios y fuera de los escenarios cuando las barras se encuentran. “El deporte hay que vivirlo como una fiesta, no podemos dejar que un desborde de pasión supere nuestra razón y tengamos que lamentar la muerte de un aficionado”, dijo el exfutbolista ecuatoriano.
En tanto, la familia de la víctima presentó la denuncia. Primero dijo que eran hinchas de Emelec y Liga, ahora la Policía investiga a los aficionados.